Foto del club de las malasmadres.
Hola de nuevo, cuando pensamos en ampliar la familia, las matemáticas me parecieron simples, tengo un hijo y tendremos otro, pues 1+1=2, hasta ahí fácil, pero resulto que no es así, la maternidad, por lo menos en mi caso no se sumo, sino que se multiplico y luego se elevo a algún dígito jajajaja, admiro a las familias que deciden tener mas de dos hijos, cuando Aitana llego al año yo dormia como máximo 5 horas al día, no es que ella no durmiera , es que ella y Daniel tenían horarios de sueño diferente, aprender a hacer juegos malabares con el tiempo se volvió una prioridad, no quería que ninguno de los dos se sintiera menos querido o apreciado o valorado, sobra decir que es desgastante y frustrante por que a pesar de mis esfuerzos Daniel se quejaba y Aitana se mostraba mas resistente a dejar mis brazos para que atendiera a su hermano, conclusión los amo, los adoro pero sus celos son suyos y no puedo vivir con sentimientos de culpa a cuenta de ellos, también necesitaba dormir, recuperarme del blue que sufrí y al día de hoy arrastro el hierro bajo. Además no puedo dejar de tener una mujer, una vida, un trabajo y un sueño por realizar en aras de ser una buena madre, por cierto a cuenta de ello decidí unirme al club de las malasmadres, me hace reír y no es que vaya hacer algunas de esas cosas pero si que pasan por la cabeza, una lectura recomendable. Saludos.